"...La evolución es en realidad el
autor intelectual detrás del telón de la vida, y es que a pesar de los
escépticos, sobre todo religiosos, la evolución es el amo y señor de la vida misma, no se puede
negar que la evolución es una verdad que rige a todo tipo de organismo en este
planeta, desde el reino animal, vegetal, hasta el fungoso. La evidencia de ello
se encuentra por doquier, como los monos arañas, los cuales en alguna parte de
su evolución decidieron prudente prescindir de sus pulgares, o el ilógico hecho
de que existan los cetáceos habitando los océanos, es decir por increíble que parezca y contra todo pronostico actualmente existen mamiferos habitando los
mares y ríos, siendo estos animales con pulmones que originalmente eran terrestres
y que respiraban oxigeno, en su paso evolutivo encontraron en el agua un medio
idóneo para seguir su desarrollo. La evolución existe y es tan palpable como la
espuma barata que los hombres se untaban en el rostro todos los días para rasurarse,
y eliminar así un barba que la naturaleza por algo les había concedido, barba con
la cual el ser humano cuenta originalmente para protegerse del frió, pero que en
los últimos tiempos con sistemas de calefacción, la habilidad de moverse de un
lugar a otro en un instante, o hasta la maldita moda, hacia que el hombre
moderno no la ocupara.
Ahora bien ya hablamos de
nosotros y demás reinos de vida, pero que podemos decir de los organismos
unicelulares, no hablo de protozoos, plancton o bacterias sino de los organismos
mas poderosos micra por micra que existen en nuestro mundo... los virus,
capaces de abatir tanto a personas como en su momento a dinosaurios. Así es,
los virus los mismos organismos unicelulares similares a los comenzaron todo
este espectáculo llamado vida, son también los organismos mas peligros que
existen. Tales virus tampoco han tenido fácil su constante enfrentamiento con
el hombre, ya que antibióticos, medicamentos, tés milagrosos, plantas
medicinales, la fe, y hasta chamanes charlatanes les han hecho la vida difícil
desde el día cero de nuestra relación simbiótica. Lo anterior ha propiciado a
que dichos virus cobren también su parte en la carrera evolutiva, pero la
enorme diferencia de estos para con los demás organismos en el planeta, es que
en ellos la evolución avanza a pasos agigantados, dándole a los virus la aparente
habilidad de mutar a voluntad en un santiamén, según los retos que antibióticos
sintéticos o anticuerpos naturales les ofrecen claro esta.
Y es que para poder llegar a ver
cambios evolutivos significativos en todo tipo de organismo necesitamos medirlo
en generaciones y no en años, y si tomamos en cuenta los múltiples medios que
tienen los virus para reproducirse, dejan atrás a cualquier otro método en cuestiones
de meses, y en algunos casos días. Hay virus que se vuelven de aeróbicos a
acuáticos, de transmisión sexual o sanguínea a cutánea, por mencionar algunos,
tales cambios les dan a los mismos una habilidad de sobrevivir tan versátil como una navaja Suiza, y
teniamos a los hombres peleando batallas increíbles contra estos pequeños invasores.
Ejemplos de virus destructivos hubo tanto en
la historia antigua como en la contemporánea, tal como la peste que azoto a la
humanidad en la edad media, o la rápida y prolífica propagación del SIDA en la
parte final final del siglo XX, por cierto hablando del SIDA, a pesar de ser
los virus organismos unicelulares sin cerebro, parecen con una perversa astucia
atacar nuestras mas bajas debilidades, que en el caso del VIH explota la
incesante y lujuriosa sed de hombre por el sexo, y ante los constantes ingresos
al club de ceros positivos, el SIDA se estaba convirtiendo en la plaga numero
uno del mundo, hasta ese entonces, pues lo que habría de venir, apocaría los
resultados obtenidos por el VIH.
Y es que dada la versatilidad de
los virus, pareciera que siempre van un paso adelante y conocen cada una de
nuestras jugadas, como si estuvieran viendo nuestra mano en un juego de poker.
Otro ejemplo fue la rápida proliferación del virus de la Influenza porcina hace
algunos años, virus que aun y cuando no cobro tantas vidas como se había
mencionado, si se esparció rápida y certeramente, cambiando de transmisión
aérea a cutánea o por medio de fluidos, en fin tal pareciera que simplemente la
innovación no solo se trata de un don ligado inherentemente a estos, sino mas
bien una necesidad para sobrevivir.
Los
virus saben que eso de “renovarse o morir”, para ellos no es solo uno mas de
los múltiples clichés que existen, sino un estilo de vida, lo que nos conduce a
entrar en materia para el lamentable relato que nos atañe, ya que esta historia
habla acerca de un habil virus que.... logró lo imposible..., y nos convirtió
en los pájaros Dodó de la islas Mauricio de nuestra era, lo que ni el mismo hombre inclusive había logrado
antes… aniquilar casi toda la población humana, dicho villano, diminuto quizás
pero altamente efectivo fue una nada mas y nada menos que una mutación del
virus de Pues ahí lo tienen amables amigos, la rabia de perro fue la que origino todo la problemática en mi novela, así que estén atentos pues iré subiendo mas detalles de mi novela para que la vayan conociendo